El sector público español, transformación digital a medio gas
La transformación digital es la senda que deben transitar todos los sectores en su camino hacia el futuro. El sector público no puede quedarse atrás ante esta revolución que está cambiando el modo de trabajar y de relacionarse con los ciudadanos.
En los últimos diez años, la Unión Europea ha desarrollado una serie de programas dirigidos a la modernización del sector público – Plan de Acción de Administración Electrónica, Iniciativa i2020 Agenda Digital para Europa y Estrategia de Mercado Único Digital- que los países miembros han desarrollado con desigual resultado.
El informe “eGovernment Factsheets Anniversary Report“ elaborado por la Comisión Europea mantiene que la mayoría de los países miembros (más otros seis asociados) han logrado definir políticas de digitalización y desarrollar marcos legales en materias como los servicios digitales, las infraestructuras de la administración pública, el open data o la ciberseguridad. Además, han impulsado las capacidades digitales tanto de los ciudadanos como de los funcionarios.
Pero, ¿en que se traduce esto en la realidad? ¿Y qué ha sucedido en España?
Pues partiendo de los datos de otro estudio “La Administración Digital en España” (redactado por la consultora Ernst & Young) podemos concluir que las administraciones públicas españolas no cumplen con los principales requerimientos reflejados en la regulación, que conllevarían la modificación de su funcionamiento y del modo de atender los servicios públicos.
Es decir, que, de momento, los avances para encaminarse hacia la transformación digital apenas se reducen al desarrollo normativo y están lejos todavía de su total implantación. Como suele suceder, la tecnología va por delante de la burocracia y la legislación.
Según los autores del estudio, las administraciones públicas deberían acometer un plan estratégico global de transformación digital para amoldarse a las nuevas exigencias de las empresas y los ciudadanos.
Ninguna cumple al 100%
Como ejemplo, solo 10 de las 17 comunidades autónomas cumplen al 100% con la asistencia al ciudadano y las empresas a través medios electrónicos y ninguna comunidad ni ayuntamiento cumple totalmente con los requerimientos de registro electrónico.
Sin embargo, siempre existen excepciones, y varias comunidades autónomas están más avanzadas en desarrollo digital. La primera de ellas es el País Vasco, seguida por Galicia, Cataluña, Asturias y Madrid.
Una buena muestra del liderazgo digital de estas comunidades son los proyectos desarrollados por Virtual Desk para el Ayuntamiento de A Coruña –la creación de una plataforma única a través de la que es posible interactuar entre distintos niveles de gestión municipal y con los ciudadanos- o para el consorcio de transportes de la Comunidad de Madrid, que ha supuesto La implantación de una plataforma analítica basada en tecnologías Big Data, que permite manejar una inmensa cantidad de datos y obtener de ellos información en tiempo real para asegurar la toma de decisiones y medidas satisfactorias para el ciudadano.
Porque la contratación de servicios externos experimentados en procesos de transformación digital, como Virtual Desk, puede marcar la diferencia a la hora de seguir avanzando en la modernización del sector público mediante la tecnología y los procedimientos más sofisticados: computación en la nube, digitalización y movilización de procesos con instrumentos open source, inteligencia de negocio, gestión documental, sistemas basados en Big Data, analítica avanzada e inteligencia artificial.