La digitalización, salvavidas de la economía española
La digitalización, salvavidas de la economía española
La mayoría de los analistas coinciden en que, debido a la crisis del coronavirus y a la congelación de los sectores de actividad, este año la economía española entrará en recesión. Acreditadas agencias de calificación crediticia, como Standard and Poors, lo confirman, lanzando una previsión de bajada del PIB de un 1,8%.
Muchos expertos vaticinan, además, que el mundo no será ya el mismo después de este paréntesis, que tanto los modelos políticos, como los sociales y los financieros cambiarán sustancialmente. En esta evolución jugarán un papel clave la tecnología y la transformación digital que ya está en marcha, pero que se verá propulsada por los acontecimientos actuales. De hecho, la digitalización podría incluso convertirse en uno de los salvavidas que reflotaran la economía española en la era post COVID-19.
Así lo afirma el libro “Sostenibilidad, Responsabilidad Social y Éxito Empresarial”, de la firma Advice Strategic Consultants. Tras realizar mediciones considerando los modelos del Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial o el Foro Económico Mundial y recopilando las opiniones de las compañías del IBEX-35, de la Administración Pública y de empresarios y autónomos españoles, esta consultora ha llegado a la conclusión de que, en una década, España podría sumar 1,2 billones de euros al PIB. Para lograrlo, tendría que orientarse hacia un capitalismo más inclusivo, caracterizado, entre otros factores, por la producción sostenible, la responsabilidad social y la digitalización. Solamente el peso de la digitalización añadiría unos 180.000 millones a las cifras actuales.
La digitalización es el futuro, esto es una realidad, que en la situación actual se vuelve más real que nunca. Esa tecnología digital, que ya está participando en la lucha contra el COVID-19, nos ayudará a superar el preocupante escenario económico que esta crisis sanitaria está ya creando. Impulsadas por la digitalización, las empresas -grandes y pequeñas- y, por extensión, la economía en general, podrán salir del bache en el que se encuentran actualmente.
Las consultoras tecnológicas especializadas en transformación digital, como Virtual Desk, están ya listas para afrontar los desafíos venideros y para ayudar a las empresas y administraciones a activar su transformación digital y asegurar su supervivencia y su porvenir.
Tecnología digital vs. COVID-19
Tecnología digital vs. COVID-19
La sociedad actual jamás había vivido una pandemia como la que estamos sufriendo en estos momentos. Sabíamos cómo afrontar otro tipo de emergencias sanitarias, pero no estábamos preparados para contener una enfermedad con esta capacidad de propagación. Al no haber precedentes previos (el más cercano podría ser la gripe española de 1918), tampoco había protocolos de actuación adaptados al siglo XXI.
Los médicos y los científicos están tratando incesantemente de buscar los instrumentos más adecuados para enfrentarse al COVID-19 y detenerlo. La medicina y la ciencia siempre han estado en primera línea de batalla contra la enfermedad, lo que nadie esperaba era que la tecnología digital fuera a tener un papel tan relevante en esta confrontación.
En Virtualdesk, ya hemos hablado de la apuesta que se está haciendo en España y en la Unión Europea por el machine learning en el sector sanitario, y de cómo la analítica avanzada se está revelando como una nueva arma contra el cáncer, pero en esta situación, el Big Data ha demostrado tempranamente su potencial, al avisar diez días antes que la OMS de la existencia de un brote infeccioso en Wuhan.
En estas circunstancias, las autoridades de todo el mundo están tomando medidas inéditas y utilizando mecanismos que solo la ciencia ficción había sido capaz de imaginar. Drones vigilando que los ciudadanos permanezcan en sus casas, aplicaciones que detectan la movilidad de las personas y si éstas se encuentran en una zona “caliente” de contagios, dispositivos que monitorizan a los usuarios de los medios de transporte…
Una de las últimas medidas del Gobierno español ha sido la solicitud de un estudio de movilidad aplicada a la crisis sanitaria. Tal y como anuncia la disposición general del Ministerio de Sanidad: “Se pretende contar con información real sobre la movilidad de las personas en los días previos y durante el confinamiento. El objetivo es entender los desplazamientos de población para ver cómo de dimensionadas están las capacidades sanitarias en cada provincia”
Esta actuación, que ya estaba siendo iniciada por varias comunidades autónomas como Valencia, seguirá el modelo iniciado por el INE en su estudio de movilidad previo y se realizará, al igual que dicho estudio, mediante el cruce de datos de los operadores móviles, de forma anonimizada y agregada.
El objetivo es determinar si se está cumpliendo el confinamiento, ubicar las áreas de contagio, para distribuir y optimizar los recursos y comprender cuál es la movilidad real de las personas y del virus, durante este tiempo.
La visión de Virtual Desk en este campo -sobre la que ya está trabajando- es la de complementar esta información proveniente de los operadores de telefonía, con otra procedente de nuevas fuentes de datos como sensores, apps…, de manera que se enriquezcan los modelos analíticos y sea posible afinar mucho más en la identificación de la movilidad de los ciudadanos y sus posibles interacciones con otros individuos infectados del Covid-19.
Con los modelos basados en telefonía móvil, podría darse el caso de que un ciudadano geolocalizado en un punto determinado del segundo piso de un edificio concreto, tendría las mismas coordenadas georeferenciadas que otro individuo en ese mismo edificio, pero en el tercer o en el cuarto piso. Es decir, si no enriquecemos la información con otros datos, tendríamos que aislar a un edificio entero por el simple hecho de que un vecino del segundo piso tenga riesgo de contagio, por haber coincidido con un ciudadano infectado. Esto es solo un ejemplo del potencial inexplorado y extraordinariamente útil que ofrece la tecnología digital.
En la era actual, nunca antes nos habíamos enfrentado a una enfermedad similar, pero también es cierto, que nunca antes habíamos contado con las armas digitales de las que disponemos ahora. El reto es enorme, pero nuestras capacidades tecnológicas también lo son. Ahora es el momento de explorar todas las posibilidades y mostrar cómo la tecnología puede ayudar a la sociedad a salvar el presente y a construir el futuro.